La semana pasada estuvimos hablando en clase de la festividad de San Antón, buscamos en Internet imágenes donde se bendecía a toda clase de animales (perros, gatos, pájaros, etc.), aunque lo que más llamo la atención de los niños/as fue la rosca que ese día se comía.
El viernes nada más entrar a clase, Lucía nos contó que tenía una sorpresa para todos nosotros/as...¡su mamá le había comprado una rosca de San Antón para que entre todos/as la comiéramos en clase! Los niños/as estaba deseando probarla, pero decidimos esperar a la hora del bocadillo. Nos gustó tanto la rosca que no solo la comimos a la hora del bocadillo, sino que los niños/as quisieron probar otro trocito antes de irse para casa. Las fotos que a continuación vais a ver son del segundo momento, por eso falta un trozo de rosca. Desde aquí dar las GRACIAS a Rocío (mamá de Lucía) por este gesto tan bonito.
Gracias Rocio por este gesto tan bonito.
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